Crianza: cada variedad se elabora por separado 12 meses en barrica roble francés, de 400 y 500 litros y fudres de 1.500 litros. Este vino no ha sido ni estabilizado, ni filtado. Color: vino de color atractivo y brillante, cereza picota de intensidad media.
Nariz: es fragante y rica en matices, destacan las frutas rojas típicas de la Garnacha, la mineralidad propia de su terruño y notas especiales y de maderas nobles. En boca: presenta un cuerpo medio, con buen volumen, tanino maduro y dulce; acidez viva. Final sabroso, intenso y refrescante; buena persistencia aromática.